Dar sin recibir (Nicole Valentina Becerra Ruiz)

Un día un muchacho muy pobre, quien era vendedor de puerta a puerta para pagar sus estudios con solo diez centavos tenía mucha hambre. Entonces decidió que en la próxima casa iba a pedir comida. No obstante perdió su coraje cuando pidió un vaso con agua. Ella pensó que él se veía hambriento y le trajo un vaso con leche. Se lo tomó lentamente y luego le preguntó: ¿cuánto le debo?, -no me debe nada- ella respondió, -mi mamá nos enseñó a nunca aceptar pago por bondad, el dijo –entonces le agradezco de corazón. Cuando Howard Kelly se fue de esa casa no solo se sintió más fuerte en sus fuerzas sino también en su fe en Dios y en la Humanidad, él ya estaba listo para rendirse y renunciar.

Años más tarde esa joven muchacha se enfermó gravemente, los doctores locales estaban muy preocupados, finalmente la enviaron a la gran ciudad donde llamaron a especialistas para que estudiaran su rara enfermedad, uno de esos especialistas era el doctor Howard Kelly, cuando él se dio cuenta del nombre del pueblo de donde ella venía, una extraña luz brilló a sus ojos. Inmediatamente él se levantó y fue al cuarto donde ella estaba. Vestido en sus ropas de doctor fue a verla y la reconoció inmediatamente, luego volvió a su oficina determinado a hacer lo posible por salvar su vida.

Desde ese día le dio atención especial al caso, después de una larga lucha la batalla fue ganada, el doctor Kelly pidió la cuenta final para su aprobación, la miró y besó, escribió algo en la esquina de la factura y la cuenta fue enviada, ella sintió temor de abrirla porque estaba segura de que pasaría el resto de su vida pagándola. Luego algo llamó su atención en la esquina de la factura, ella leyó las siguientes palabras: pagado por completo con un vaso de leche.